Traducido por Jalil Sahurie

Agencia de Noticias de Ahlul Bait (ABNA)
— El clérigo suní, Shawki Allam, ha destacado que el derramamiento de
sangre es altamente prohibido en el Islam y se considera más grave que
el pecado de la demolición de la Kaaba, edificio sagrado de los
musulmanes que se encuentra el La Meca.
Cuatro musulmanes shiítas egipcios murieron en un ataque de una turba en el pueblo de Zawyat Abu Musalam en Giza el domingo.
Una
multitud anti-shiíta re reunieron fuera de la casa donde un grupo de
musulmanes celebraban el aniversario del nacimiento del duodécimo Imam
Shiíta. La violencia, que incluyó el asesinato del prominente clérigo
shiíta Sheij Hassan Shehata junto a cuatro de sus seguidores y otras
decenas de heridos, fue registrada en chocantes imágenes de video.
"El Islam no reconoce tales prácticas [violentas] que contradicen la naturaleza humana", dijo Allam el lunes.
El
clérigo suní subrayó que el derramamiento de sangre es altamente
prohibido en el Islam y se considera más grave que el pecado de la
demolición de la Kaaba, edificio sagrado de los musulmanes que se
encuentra el La Meca.
Allam
pasó a explicar que el Islam prohíbe la mutilación de los cadáveres.
"El Islam nos manda a tratar el cuerpo como un ser humano, prohibiendo
golpear y arrastrar los cadáveres".
Allam advirtió sobre el montaje de la fricción sectaria en Egipto que ha "absorbido al país en una vorágine de violencia".
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